Jorge Brito Obreque
Hemos sido testigos en el último tiempo, de diversas irregularidades que se cometen en varias instituciones, desde el ámbito privado, pasando por instituciones vinculadas a las fuerzas armadas y de los diversos estamentos del sector público, las últimas semanas hemos visto como estos escándalos han tocado los gobiernos comunales. Todo lo anterior lleva a un descredito del servicio público y de la vida política. De acuerdo a las últimas encuestas de opinión, los líderes políticos son los que generan mayor rechazo y menor confianza por parte de la ciudadanía. ¿Cómo se puede revertir esta situación? Una ciudadanía bien informada es una ciudadanía más activa. Por consiguiente, la desinformación y lo difícil de conseguir los datos, asociado a la forma en que éstos se presentan, sumado a la irresponsabilidad, el clientelismo y la corrupción, nos han llevado a vivir una crisis de como los ciudadanos perciben la política y sus instituciones. Ello debilita fuertemente la vivencia de una sociedad democrática y es caldo de cultivo para la aparición del populismo y caudillismo, aspectos que son la antítesis de la vivencia de una sociedad plenamente democrática.
La transparencia de datos, rendiciones de cuentas públicas e informadas, divulgación, fomento a la participación son mecanismos para ejercer un mayor control social sobre las finanzas públicas y la gestión de las autoridades, de este modo se puede asegurar un mejor uso de los recursos de todos los chilenos. Necesitamos conocer, como sociedades más desarrolladas en el mundo han dado paso en pos de la transparencia proactiva de las instituciones, es mas existen algunas experiencias que han sabido armonizar la transparencia con enfoques pedagógicos promocionando la participación ciudadana. Ejemplo de ello es el “Observatorio Ciudadano Municipal” en España, “offener haushalt” en Alemania, y varios otros.
Si bien en Chile se han dado pasos importantes en cuanto a la transparencia en la gestión de recursos públicos, estamos al debe en cuanto a que la información entregada por transparencia no siempre resulta ser información clara que permita identificar los orígenes o destino de los dineros. Y la otra gran debilidad es que la transparencia que ha promovido el estado aun no permea lo suficiente a la administración municipal.
Es importante por consiguiente avanzar en la perspectiva del empoderamiento ciudadano , que asegure un mayor control sobre los gobiernos comunales , la creación de observatorios municipales, con plataformas virtuales que acerquen los presupuesto municipales a la ciudadanía y ayude a realizar incidencia a partir de estos datos. Avanzando en una cultura de la transparencia y de la participación como verdaderos observadores ciudadanos de sus gobiernos comunales. De este modo estaremos contribuyendo a fortalecer nuestro sistema democrático y poniendo al servicio público en el lugar de prestigio que se merece.