El valor del emprendimiento

Para quienes están familiarizados con la parábola de los talentos, está claro que dice relación con la responsabilidad social que tenemos de aprovechar al máximo nuestras capacidades, en el contexto de las oportunidades que el entorno nos ofrece, y convertirnos en generadores de desarrollo.

El emprendimiento es, sin lugar a dudas, un motor de movilidad social, de desarrollo y de innovación, que en su ejecución deja a un lado los miedos y aprehensiones.

No obstante lo anterior, no puede desconocerse que para que una idea llegue a buen puerto, no basta sólo con la genialidad y las ganas. En el contexto de una sociedad en vías de desarrollo, aún más, en el de una Región como el Maule -con bajos índices salariales, de capital social y humano y alto nivel de ruralidad-, un apoyo profesional e institucionalizado se hace vital para poder concretarla exitosamente. No es fácil salir adelante solo. Sabemos que la pequeña y mediana empresa es el motor de desarrollo de una localidad, comuna o región, por ello se hace necesario su fortalecimiento. De este modo, en la Región del Maule se cuenta con instituciones dedicadas al fomento de estas iniciativas.

Es así como la micro, pequeña y mediana empresa -que constituyen más del 80 por ciento de las unidades productiva del Maule- disponen de diversos instrumentos de fomento provenientes del estado como CORFO, FOSIS, INDAP y SERCOTEC, de programas de amplio impacto que buscan validar y promover la opción de emprender y /o el uso de la innovación, gestión e inversión.

Una ayuda que cruza todo el espectro, y que comienza, en el caso de estas reparticiones estatales, considerando a quienes quieren emprender por primera vez, aquéllos que tienen los talentos y las ganas, ofreciendo apoyo para que puedan concretar sus ideas, a través de diversos instrumentos de fomento.

Contrario a lo que se podría pensar, estos apoyos no se agotan en el recurso económico, importante pero muchas veces no suficiente. También, considera la ayuda para obtener asistencia técnica, mejorar servicios y la calidad de los productos y servicios. Porque una cosa es el financiamiento para llevar adelante una idea… y otra muy distinta es la orientación, la capacitación, para saber cómo gestionarla bien.

Todo ello, para que los emprendedores, que tienen el valor de arriesgarse a potenciar sus talentos, se desarrollen y sean fuente de crecimiento y bienestar para sus familias, comunidades y región

Publicado en .