Fundación CRATE y el Área de Desarrollo Sustentable invitan a conmemorar el Día Internacional sin Bolsas Plásticas

El día de hoy: viernes 3 de julio, se celebra el Día Internacional sin Bolsas Plásticas con la meta de promover la reducción del consumo de este tipo de artículos que impactan al medio ambiente y afectan tanto a la salud humana como animal.

Esta conmemoración surgió de un grupo de organizaciones no gubernamentales de diferentes países y se inició en España.

Según datos del Ministerio del Medio Ambiente, en Chile se utilizan cerca de 250 millones de bolsas plásticas al mes, de las cuales el 90% termina en un vertedero. Se estima además, que cada persona utiliza en promedio 1,5 bolsas diarias.

Los residuos plásticos inundan los océanos del mundo acumulándose sobre todo en cinco áreas en las que se advierten “grandes cantidades” de microplásticos que ya podrían estar ya afectando a los peces más pequeños y, por tanto, a la cadena alimentaria oceánica.

La contaminación de los océanos por cuenta del plástico causa anualmente la muerte de un millón de aves y 100.000 mamíferos marinos, según la ONU. Para conmemorar el Día Internacional Libre de Bolsas de Plástico, Semana Sostenible revive algunas publicaciones sobre temas que instan a actuar.

Y los principales residuos detectados en los mares son precisamente los que componen a las bolsas, es decir, polietileno y polipropileno y  otros polímeros que también se usan para la elaboración de productos de uso diario como contenedores de bebida y comida o juguetes.

Estudiosos norteamericanos ya bautizaron a estas concentraciones como “sopas de plástico”, agregando que son tan peligrosas como el cambio climático. Mike Moore del Instituto de Investigación Marina Algalita, con sede en California, explicó que “el 35 por ciento de los peces que pescamos tienen una media de uno o dos piezas de plástico en sus estómagos”.

Ante esta realidad desde el Área de Desarrollo Sustentable se promueve el no uso de bolsas plásticas y en reutilizar o reciclar aquellos envases que generalmente van a la basura llegando generalmente a los océanos. Es así como se promueve la reutilización de ellos en maceteros tanto para almácigos como para plantaciones en cultivos de espacios reducidos, contribuyendo así a una economía de tipo circular.

Publicado en Desarrollo Sustentable, Institucional.