El Papa Francisco, nacido Jorge Mario Bergoglio el 17 de diciembre de 1936 en Buenos Aires, Argentina, falleció el 21 de abril de 2025 a los 88 años en su residencia en la Casa Santa Marta, Ciudad del Vaticano. Su muerte fue confirmada por el cardenal Kevin Farrell, quien destacó que toda su vida estuvo dedicada al servicio del Señor y de su Iglesia, enseñando a vivir los valores del Evangelio con fidelidad, valentía y amor universal, especialmente en favor de los más pobres y marginados.
Francisco fue elegido Papa el 13 de marzo de 2013, convirtiéndose en el primer pontífice latinoamericano y jesuita en la historia de la Iglesia Católica. Durante su papado, promovió temas clave como el cuidado del medio ambiente, la inclusión de las mujeres y el diálogo interreligioso. Su vida religiosa comenzó a los 21 años al ingresar en la Compañía de Jesús, siendo ordenado sacerdote en 1969 y más tarde arzobispo de Buenos Aires. Fue nombrado cardenal en 2001 por Juan Pablo II.
El Papa Francisco falleció tras una estancia de cinco semanas en el hospital debido a una neumonía bilateral que requirió hospitalización en el Hospital Gemelli de Roma. Su salud continuó deteriorándose, y el 20 de abril de 2025, impartió su última bendición Urbi et Orbi tras la misa de Pascua en la Plaza de San Pedro, donde se le vio notablemente debilitado.
Su fallecimiento ha generado una profunda tristeza en todo el mundo católico, y se han decretado días de duelo nacional en varios países, incluido Chile, donde el presidente Gabriel Boric lamentó su muerte y decretó tres días de duelo nacional.
Su legado perdurará como un ejemplo de humildad, compromiso social y apertura al diálogo interreligioso.
Con gratitud recordamos su incansable labor por la justicia social, la paz, el cuidado de la creación, nuestra Casa Común, la migración mundial y la dignidad de los más vulnerables. Su vida y mensaje fueron faro de esperanza y compromiso para millones en todo el mundo.
Elevamos nuestras oraciones por su descanso eterno y renovamos nuestro compromiso de seguir construyendo un mundo más justo, fraterno y solidario, tal como él nos enseñó.
